– El proyecto contempla derribar el actual recinto para cicloturistas y unirlo al edificio de alojamiento
– La ampliación impulsada por el PSN se sufragaría con un aumento de la cuota por noche que pasaría de 4 a 7 euros
La antigua herrería aledaña al albergue de peregrinos municipal de Estella podría derribarse para dar paso a un edificio de baja más dos -como permite su ficha urbanística del casco viejo- si prospera el planteamiento del grupo municipal socialista. El proyecto, que según el portavoz del PSN José Ángel Izcue cuenta con el visto bueno de la comisión de Cultura y que también se ha entregado al resto de los grupos, contempla integrar el nuevo inmueble con el del albergue al tener la misma altura.
La ampliación no supondría un aumento de plazas. En la herrería, proyectada inicialmente como almacén de bicicletas, se optó por colocar literas con capacidad para 40 personas para atender la avalancha de peregrinos durante el verano. Con la nueva obra, se dejarían en la mitad. “Pero en buenas condiciones y no en precario como ahora”, añadió Izcue.
120 plazas
El PSN ha promovido esta iniciativa aprovechando la paralización del proceso de adjudicación de la gestión del albergue. La oposición pidió al titular de Cultura, el regionalista Félix Alfaro, que detuviera la tramitación por considerar que el condicionado favorecía a la presentación de ofertas de asociaciones y empresas frente a particulares. Desde su apertura en agosto de 1996, los Amigos del Camino de Santiago de Estella se encargan de la instalación ubicada a la entrada de la calle La Rúa.
Ahora los socialistas pretenden que el pago de los trabajos -cuya inversión se ha valorado en torno a 350.000 euros- vaya incluido dentro de la concesión de explotación del albergue. Para asumir costes, el arrendatario, según la propuesta del PSN, subiría la cuota de 4 euros por noche hasta 7.
De fructificar este planteamiento, el albergue sumaría 120 plazas. “Sería también necesario revisar las existentes en el actual edificio y quizá crear espacios más amplios a los existentes. En definitiva, ofrecer un lugar más cómodo y adecuado”, indicó José Ángel Izcue.
Aunque el Ayuntamiento adquirió la antigua herrería en 1996, a la par que se acondicionó el albergue, no fue hasta el 2001 cuando se acometió la primera obra en el recinto. Aquel verano se reservó el espacio sólo para los cicloturistas que, además de las mencionadas literas, también disponían de dos baños, otro par de duchas y un patio para dejar las bicicletas de los peregrinos.
Paralelamente a esta propuesta, el área de Hacienda estudia la redacción de un nuevo pliego de condiciones para la explotación del albergue de peregrinos. Entre las propuestas barajadas, a parte de dejar el documento como está, se contempla la posibilidad de realizar un convenio con los Amigos del Camino de Santiago para que asuman la gestión o que fuera el propio Ayuntamiento el encargado.
En este último caso, la propuesta pasa por valerse de programas de empleo con una subvención foral de hasta el 80% de cara a costear el sueldo a personas con dificultad para encontrar trabajo.
Fuente: diariodenavarra.es