¿Cuál es el mejor albergue para ti? ¿En qué aspectos debes fijarte? ¿Siempre es necesario hacer reserva previa? Podrás resolver estas y otras cuestiones antes de coger el bastón e iniciar tu aventura.
Lo más habitual a la hora de realizar el Camino de Santiago es pernoctar en albergues, el tipo de alojamiento más barato —y en ocasiones, gratuito— y que más concentra la esencia de la Ruta Jacobea.
Entre las ventajas de dormir en un albergue no solo está el ahorro que supone frente a otro tipo de alojamientos, sino el hacer amistades, conocer a muchos otros peregrinos y conseguir una conexión más fuerte con el Camino.
Por supuesto, no son todo ventajas: algunos albergues están mal cuidados y acondicionados, son menos cómodos, padecen mucha saturación o no están bien adaptados para personas con movilidad reducida o lesiones. Además, la mayoría no admiten mascotas, algo a tener en cuenta si quieres hacer el Camino con ella.
Al hablar de albergues públicos, por ejemplo la Red Pública de Albergues del Camino de Santiago en Galicia —nacida en 1993— toma como modelo la red de hospitales para peregrinos existentes en el medioevo, entendido hospital no en el sentido moderno, sino como hospedaje. A día de hoy, esta red cuenta con unos 70 centros en la comunidad autónoma de Galicia y más de 3.000 plazas públicas en los distintos Caminos que llegan a Santiago de Compostela.
Otra opción es la de los hostels, hostales, posadas y pensiones cuando no encuentras sitio en un albergue, algo que puede suceder en varias etapas si te inclinas por el Camino Francés en verano y no has preparado la andadura con suficiente antelación. Este tipo de alojamientos tienen un nivel inferior a un hotel, pero suelen ofrecer más calidad de servicio y mayor intimidad que los albergues convencionales.
Las pensiones, hostales y posadas tienen un precio ligeramente superior o similar a los albergues de tipo privado, con precios por noche que rondan los 20-25 euros aproximadamente, pudiendo variar si la habitación o el baño son de carácter compartido o privado.
¿Cuánto cuestan los albergues para el Camino de Santiago? Diferencias de precios de los públicos y privados
Vamos a analizar las diferencias entre los albergues públicos y privados para el Camino de Santiago.
En los albergues públicos deberás ser rápido a la hora de llegar para tener plaza (especielmente en los momentos de mayor aglomeración, como el verano o Semana Santa), o confiar en la suerte, ya que las plazas se reparten según el orden de llegada de los peregrinos.
Además, suelen tener preferencia los que llegan a pie antes que los peregrinos que hacen el Camino de Santiago en bicicleta o a caballo.
Como norma general, solamente se puede pernoctar durante una noche y los albergues públicos normalmente no admiten reserva previa, lo que es una de las grandes diferencias con relación a los albergues privados, ya que muchos de éstos sí admiten reserva, bien a través de los medios convecionales de comunicación, bien a través de plataformas de reservas.
Por otro lado, algunos albergues públicos son gratuitos, aunque solicitan un donativo responsable para ayudar a su mantenimiento. En el caso de los que sí cobran, la cantidad es simbólica y hace que la experiencia resulte muy barata; su coste oscila entre los 5 y los 10 euros por persona.
Otra distinción con respecto a los albergues privados es que son más modestos y tienen menos comodidades. No en todos hay cocina, secadora o lavadora a disposición del peregrino.
Antes de pasar a los albergues privados, también existen los albergues religiosos y parroquiales, que dependen de la entidad religiosa a la que pertenecen. Muchos de ellos tampoco tienen un precio establecido, funcionando a través de donativos. Su aforo es de los que más rápido se cubre, por lo que es fácil quedarse sin cama.
Los albergues privados del Camino de Santiago son más costosos, pero ofrecen una mayor calidad. Su precio es asequible, ya que el rango de precios oscila aproximadamente entre los 8 y los 15 euros por noche, aunque puede ser superior dependiendo de las facilidades ofrecidas al peregrino, así como de la época del año.
Tienen más comodidades como lavandería o WiFi, pero también es aconsejable reservar plaza si vas a hacer el Camino en verano, especialmente en las etapas de Sarria a Compostela del Camino Francés, las más saturadas.
Albergues con reserva online
Como ya hemos comentado, existen multitud de albergues en los que es posible reservar plaza con antelación, muchos de ellos a través de plataformas de reservas seguras, como puede ser Booking.
Nuestro consejo es no jugársela a encontrar plaza disponible en un albergue, sino reservar con antelación, especialmente si vas a caminar en los momentos de mayor saturación del Camino: verano, Semana Santa, y también los meses de mayo y septiembre, donde existe una gran afluencia de peregrinos de fuera de España en el Camino.
A continuación te enlazamos con páginas en las que puedes ver la relación de albergues en los que puedes reservar online en los Caminos más transitados:
- Albergues con reserva online en el Camino Francés
- Albergues con reserva online en el tramo entre Sarria y Santiago de Compostela
- Albergues con reserva online en el Camino Portugués
- Albergues con reserva online en el Camino Portugués por la Costa
- Albergues con reserva online en el Camino del Norte
5 recomendaciones para elegir albergue en el Camino de Santiago
- Sé previsor y reserva plaza en los albergues privados, especialmente si viajas en verano: La antelación es muy importante, sobre todo al hacer el Camino Francés en los meses de junio a septiembre. Esta ruta acapara cada año a más de las tres cuartas partes de los peregrinos.
- Si vas a dormir en un albergue público o de donativo, lo esencial es ser madrugador para completar la etapa y llegar pronto, ya que se completa el aforo por orden de llegada.
- Organízate especialmente bien si vas a hacer el Camino de Santiago con tu mascota, puesto que la gran mayoría de los alojamientos no permiten pernoctar con ella. Los hoteles o alojamientos que lo permiten te costarán 35 o 40 euros.
- Buena organización logística: Según el recorrido planificado, deberás fijarte en la ubicación de cada albergue, estratégicamente situado al principio y al final de cada etapa que vayas a realizar. Sin embargo, en casi todas las rutas más concurridas, como el Camino Francés, Portugués o del Norte, también los hay en puntos intermedios entre etapas ‘oficiales’.
- Si la libertad de entrada y horario es clave para ti, quizás sea mejor la opción del albergue privado. De todos modos, en todos ellos debes ser una persona cuidadosa con los horarios de los demás y el ruido, ya que lo habitual es levantarse antes de que salga el sol para comenzar a caminar.
Sobre todo, disfruta de la experiencia de dormir en un albergue y cocinar, charlar, compartir momentos y experimentar vivencias con otros peregrinos de diferentes procedencias, edades y culturas. El encanto de pernoctar en estos alojamientos reside, desde hace siglos, en la conexión humana y el sentido espiritual de viajar con lo puesto hacia el mismo destino.
