Agés es uno de esos lugares del Camino de Santiago Francés que sorprende al peregrino. A solo 25 kilómetros de Burgos capital, esta pequeña localidad adscrita al Ayuntamiento de Arlanzón ha sabido reinventarse gracias al paso constante de caminantes. Hoy, Agés no es solo una etapa con encanto, sino también un ejemplo de cómo el Camino puede revitalizar el alma de un pueblo.
Un pasado con raíces mozárabes
Pese a su tamaño, Agés es una población con profundas raíces históricas. Ya en el siglo X aparece documentada con el nombre de Haggege, y más adelante como Fageg, lo que apunta a un posible origen mozárabe. Su nombre podría estar vinculado a antiguos pobladores cristianos que vivieron en territorio musulmán, una mezcla de culturas que, de algún modo, sigue viva en su carácter hospitalario.
Arte medieval y contemporáneo entre piedras centenarias
Uno de los símbolos más reconocibles del paso jacobeo por Agés es su puente de piedra de un solo arco, atribuido a San Juan de Ortega, que guía a los peregrinos sobre el pequeño río Vena. Es un lugar cargado de simbolismo, donde muchos se detienen a contemplar el entorno o a inmortalizar el momento con una fotografía.
No lejos de allí, la iglesia de Santa Eulalia, de estilo renacentista, guarda una preciosa fachada plateresca. Es uno de esos templos modestos en tamaño pero generosos en belleza, como muchos en el Camino.
Agés también ha apostado por el arte contemporáneo, gracias al proyecto StARTer Proyectos Culturales, impulsado por Estela Rojo y Regue Fernández. Junto al artista Taquen, han creado un mural de gran impacto visual que refleja los cambios vitales que provoca el Camino, en sintonía con el espíritu de transformación que tantas personas viven al recorrerlo.
Parada gastronómica y descanso: el arte de acoger
Agés ha desarrollado en los últimos años una interesante oferta gastronómica y de alojamiento, pensada tanto para peregrinos como para visitantes locales. El albergue El Pajar de Agés fue el primero en abrir sus puertas y supuso un punto de inflexión en el desarrollo turístico de la localidad.
Hoy en día, quienes hacen alto en Agés pueden escoger entre varias opciones:
- La Rústica Caravan Bar, ideal para quienes buscan una experiencia diferente con hamburguesas creativas y ambiente informal.
- El Alquimista, con una carta de platos caseros y ambiente acogedor.
- La Taberna de Agés, que también cuenta con el albergue municipal bajo gestión privada.
- Fagus, albergue-restaurante muy bien valorado por sus raciones, bocadillos y menús del día.
Muy cerca: Atapuerca, Carex y el origen del hombre
Otro aliciente de Agés es su cercanía a los célebres yacimientos de Atapuerca, declarados Patrimonio de la Humanidad. A menos de 5 km, se puede visitar el Centro de Arqueología Experimental (Carex), una oportunidad única para descubrir cómo vivían los primeros homínidos en la Península.
Agés: cuando el Camino transforma un pueblo
El Camino de Santiago no solo transforma a quienes lo recorren, sino también a los pueblos que lo acogen. Agés es un claro ejemplo de esta simbiosis: ha sabido preservar su historia, abrir sus puertas al arte y desarrollar una oferta hospitalaria que combina tradición y modernidad.
Si pasas por aquí, tómate un respiro, cruza el puente con calma, contempla sus muros cargados de siglos y, si puedes, quédate una noche. Agés no es solo una etapa más: es uno de esos lugares que se quedan contigo mucho después de haber seguido caminando.
Basado en El Correo de Burgos
Albergues y otros alojamientos en Agés:
- Albergue municipal de Agés “La Taberna” | 36 lit. | 15€ | 10.Marzo-1.Febrero |
- Albergue El Pajar de Agés | 30 lit. + 1 hab. | 15€-16€ lit. – 55€-60€ hab. | 1.Abril-1.Noviembre | Reserva online |
- Albergue Fagus | 22 lit. | 15€ | 14.Marzo-31.Octubre |
- Otros alojamientos en Agés
Nota: precios orientativos, sujetos a posibles variaciones según disponibilidad y temporada.