Más de seiscientos peregrinos que hicieron el Camino de Santiago por la ruta del Salvador se hospedaron durante este verano en los tres albergues de la Montaña Central de Asturias.
Según informa el Consorcio Montaña Central, el Camino del Salvador es un “reto entre los peregrinos por su dureza y su belleza”.
Además, se presenta como una opción “no masificada” en la que todavía se ejerce la hospitalidad con los peregrinos, ofreciéndoles un lugar donde descansar, alimentarse y obtener auxilio físico y espiritual.
Concretamente, el albergue de Payares acogió a 220 peregrinos que hicieron el camino a pie, en bicicleta o a caballo, mientras que los centros de La Pola y Mieres contaron con las visitas de más de 200 caminantes cada uno.
En algunos casos el mismo peregrino utiliza, al menos, dos de los tres albergues, dependiendo del medio de locomoción que utilice para desplazarse.
Otros peregrinos del Camino del Salvador no utilizan los albergues, sino que se alojan en hoteles y en establecimientos hoteleros de la comarca.
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