
La Junta de Castilla y León ha ideado la iniciativa “Centinelas del camino” para que los vecinos de la zona, pero también peregrinos e incluso influencers hablen de la Vía de la Plata y la ruta hasta Santiago.
Sin embargo, el Camino ya cuenta con esos guías que desde hace décadas trabajan incansables en defensa de este camino peregrino. El padre Blas Rodríguez y todo su equipo de gente de la asociación Acasan son los claros ejemplos de ese empuje y el albergue de peregrinos de Fuenterroble de Salvatierra, su epicentro.
Allí se encuentran ahora Isabel Venegas y Tino López, entre otros. Pacense y bilbaíno, llevan meses colaborando con el padre Blas y recibiendo las visitas.
Como señala Isabel, este año han venido muy pocos. Apenas una docena por el cierre perimetral de la comunidad autónoma. Por eso, hay otros albergues públicos o gestionados por entidades sin ánimo de lucro como el de Puerto de Béjar que siguen cerrados porque Extremadura está ahí mismo y, legalmente, no se puede pasar.
Isabel llegó de su tierra en verano, “cuando sí se podía llegar” y aquí sigue. Vive con su marido en la vecina localidad de Los Santos, pero no pierde la ilusión de colaborar con la casa parroquial. Ella fue la que inició hace cerca de un año una campaña de recaudación para conseguir apoyos para el albergue, un centro que ahora hace un año cobijaba a cerca de una quincena de personas que, por circunstancias de la pandemia, se vieron bloqueados en pleno camino. Todos tuvieron cobijo al amparo del padre Blas y de sus colaboradores. Los verdaderos guardianes del Camino.
Leído en La Gaceta de Salamanca