O Barco ya contaba con albergue en el siglo XVI - Camino de Santiago

O Barco ya contaba con albergue en el siglo XVI

Vista de O Barco de Valdeorras
Vista de O Barco de Valdeorras

El mismo servía para atender a los peregrinos del Camino de Invierno pero también a los que se dirigían al Santuario de As Ermitas

Aunque en la actualidad el número de albergues para peregrinos en la localidad de O Barco de Valdeorras sea mínimo, lo cierto es que no siempre ha sido así y el paso de los caminantes por la zona, ya fuera con destino a Santiago de Compostela o al Santuario de Nuestra Señora de As Ermitas, permitió la existencia de centros para su recepción, conocidos como hospitales, desde el siglo XVI, tal y como ha documentado en 1969 el historiador Augusto Quintana.

Quintana publicaba en su obra “Valdeorras, El Barco y el Nazareno” la documentación sobre este hospital aunque no lo relacionaba con la ruta jacobea. La razón no es otra que en los años 60 del pasado siglo, se ignoraba la existencia de otras rutas a Santiago que no fuesen el Camino Francés y menos aún un trazado como el Camino de Invierno. Hoy, ya superado ese análisis, se puede afirmar que este albergue recibía a peregrinos que buscaban la bendición de Santiago pero también aquellos que desde Astorga iban al Santuario enclavado en la piedra bolesa.

Así, este hospital barquense fue fundado por Juan Giral a finales del siglo XVI y estuvo abierto durante varios siglos gracias a las rentas constituidas en la fundación.

Una de los documentos que confirman su organización es la visita que recibió por parte del obispo de Astorga, Matías Escalzo y Acedo en 1747. En ella se aclara que al frente estaba una hospitalera pero que era un Concejo y un cura quienes ejercían la dirección del centro.

El prelado realizo la visita con el fin de conocer las cuentas, cobrar deudas, reparar el inmueble, dotarlo de más camas y observar la moralidad de quienes allí se alojaban. “Encargando su Ilustrísima a la persona o personas a cuyo cargo esté el albergue y hospedaje a dichos pobres los admitan y reciban con cariño y amor, tratándolos con mucha benignidad, procurando que la ropa de las camas esté limpia y aseada en que se demuestra más la caridad, no permitieron duerman juntos en una cama hombre y mujer a menos de que la Hospitalera tenga orden del Abad o cura ante quienes exhibirán siendo casados, la certificación o testimonio auténtico”, señala la documentación de la visita del obispo.

Una documentación que atestigua la importancia de O Barco de Valdeorras en el camino a Santiago y la atención que se dispensaba a los peregrinos que elegían este camino, sobre todo en los meses con la climatología más dura.

Leído en Somos Comarca

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