
Los peregrinos han sido el verdadero salvavidas de la Semana Santa en Pontevedra. Esa es la conclusión que se puede extraer de la situación que atraviesan los hostales y albergues de la ciudad del Lérez en estos días festivos. Mientras los hoteles de la comarca están registrando una caída de hasta el 30% en las reservas debido al mal tiempo, los albergues mantienen una ocupación elevada gracias al incesante flujo de peregrinos que recorre el Camino de Santiago Portugués. Tal como dice el refrán: al mal tiempo, buena cara.
Manuel Vidal, propietario del Dpaso Urban Hostel, comentó este martes que “estamos llenos prácticamente todos los días“, y añadió que “especialmente hoy (martes) está siendo una auténtica locura“. El empresario destacó que, a pesar de la lluvia, los peregrinos siguen su ruta con determinación. “La gente ya está en camino hacia Santiago y no les importa que llueva porque van a hacer la ruta que tienen prevista igual. El resto de los turistas a veces están pendientes del tiempo, pero los peregrinos vienen igual, aunque llueva“, explicó Vidal, destacando la constancia de estos viajeros.
Esta tendencia también se observa en otros albergues y hostales de la ciudad. Ana Redondo, gerente del Aloxa Hostel, subrayó que “lo más fuerte aquí en Pontevedra suele ser el inicio de la Semana Santa, porque mucha gente sale de Tui el fin de semana anterior con la intención de llegar a Santiago entre sábado y domingo“. Como resultado, están recibiendo una gran afluencia de peregrinos en estos primeros días de la semana.
María Isabel Oroso, empleada del GBC Hostel, señaló que “para los festivos la situación está un poco más tranquila, aunque seguimos con porcentajes muy altos porque estaremos prácticamente al 100% durante toda la semana“. El impacto del Camino de Santiago es evidente en la ocupación de estos establecimientos, que logran mantenerse llenos pese a las inclemencias del tiempo.
Destacan turistas españoles y portugueses
En cuanto al perfil de los peregrinos, Oroso mencionó que la mayoría provienen de España, pero también hay una notable afluencia de portugueses y, más recientemente, un aumento de peregrinos alemanes. Esta diversidad se refleja en la clientela de otros hostales, como el Bulezen Urban Hostel, cuyo propietario, Noemí González, indicó que “casi todas las personas que llegan esta semana son peregrinos que pasan una noche y luego siguen su camino, aunque estos días también hemos tenido algunas familias que vienen a conocer Pontevedra y una chica que lleva varios días alojada“.
El Slow City Hostel, por su parte, ha recibido muchos visitantes estadounidenses y holandeses, aunque su dueño, Jorge Villa Santos, aseguró que la mayoría de sus huéspedes siguen siendo españoles. Según él, los años en los que la Semana Santa cae más temprano suelen ser mejores en términos de ocupación. “De momento ha sido un año un poco flojo, pero ahora es cuando empezamos a repuntar. Esta celebración es el anticipo de lo que vendrá después“, afirmó Villa Santos, optimista respecto a los próximos meses.
Ana Redondo, gerente del Aloxa Hostel, coincidió en que “nuestra temporada comienza ahora“. A pesar de haber estado cerrados hasta recientemente, Redondo destacó que este año ha habido más interés, con muchas más consultas y reservas anticipadas. “En este inicio de 2024 hemos visto más movimiento en invierno que en otros años“, agregó, señalando que la tendencia ha sido positiva desde el comienzo del año.
Una situación interesante que también se está observando en los albergues es que muchos peregrinos llegan a Pontevedra sin hacer reservas previas. Esto significa que los datos de ocupación pueden mejorar aún más a medida que se acerca el fin de semana. En el Bulezen Urban Hostel, Noemí González comentó que “tanto ayer (lunes) como hoy (martes) estuvimos al completo, con nuestras 64 plazas ocupadas. Para mañana (miércoles) estamos al 50%, pero lo que estamos viendo es que nos llegan muchos sin reserva o que reservan el mismo día“.
En resumen, aunque el mal tiempo ha afectado negativamente a algunos sectores turísticos, los albergues y hostales de Pontevedra han mantenido altos niveles de ocupación gracias a los peregrinos del Camino de Santiago. Esta Semana Santa ha sido un claro ejemplo de la importancia del Camino para el turismo local, permitiendo que muchos negocios se mantengan llenos incluso en condiciones climatológicas adversas. Con el inicio de la temporada alta a la vuelta de la esquina, las expectativas para los próximos meses son optimistas, y se espera que la llegada de más peregrinos continúe impulsando la actividad económica en la ciudad.
Basado en Diario de Pontevedra /