La ruta jacobea del sur alcanza cifras récord desde 2013, salvo los años de pandemia: El Camino Portugués por la Costa explota y en 2023 supera los 50.000 peregrinos por primera vez, multiplicando por cien la cifra de caminantes respecto a once años atrás
No pasa un año sin que se mencione la palabra “récord” en los informes sobre el Camino Portugués a Santiago. Las cifras oficiales de la Oficina del Peregrino confirman un crecimiento constante que solo fue interrumpido por la pandemia de covid-19. Lo mismo ocurre con los datos que maneja la Asociación de Amigos del Camino Portugués, que gestiona el albergue Virgen Peregrina, el único albergue público en Pontevedra.
Al observar las estadísticas de las últimas dos décadas, es evidente el crecimiento del Camino. En 2003, se emitieron 3.526 Compostelas, y en 2023, la cifra llegó a 150.000 caminantes. Este ascenso fue inicialmente gradual, con un aumento del 15% al 20% anual, disparándose especialmente durante los Años Santos, para luego bajar un poco. Sin embargo, a partir de 2016, se superaron los 50.000 peregrinos, una cifra que solo la pandemia logró reducir, independientemente de si el año era jacobeo o no.
Tino Lores, presidente de la Asociación de Amigos del Camino Portugués, recuerda los inicios: “Empezamos en el 93, y hasta el 99 fue muy poco a poco, no había albergues ni señalización“. En 1999 se inauguró el albergue de Pontevedra, y ese mismo año el Príncipe de Asturias recibió la insignia de oro de los Amigos del Camino Portugués en reconocimiento a su interés por promover la ruta compostelana.
El Año Santo de 1999 fue el primer gran auge de la ruta. “Empezamos en Semana Santa. En ese momento nos dejaron los talleres al lado de Bomberos y los llenamos. Fue el primer récord. Pasamos de cero a 3.500 peregrinos. Todo el mundo quería hacer el Camino“, relata Lores. “Entonces se pensaba que había que darles de comer“, añade con humor.
El Año Santo 2004 consolidó el Camino Portugués, y 2010 marcó el inicio de un ascenso importante. Lores señala: “Empezaron a venir peregrinos del Camino Francés al Portugués“. En ese mismo año se abrió el primer albergue privado en Pontevedra, cuatro años después de que se empezara a cobrar en el albergue público. Este cambio marcó el inicio de una nueva era: “Hasta entonces, parecía que si no dormías en un albergue público, no estabas haciendo la peregrinación“, rememora Lores.
En el Año Santo 2010, la ruta del Apóstol Santiago experimentó un crecimiento del 184% en comparación con el año anterior, pasando de 12.061 a 34.353 Compostelas emitidas. Fue también el primer año en que los Amigos del Camino Portugués celebraron haber superado la barrera de los 35.000 peregrinos. Después de ese auge, la cifra volvió a bajar un 36%, pero en 2014 se recuperó y no ha vuelto a descender, salvo durante la crisis sanitaria.
Con la ruta consolidada, el Camino ha mantenido un crecimiento constante, superando el 20% anual. En 2017, el aumento fue de casi el 30%, con más de 65.000 peregrinos, y en 2019, justo antes de la pandemia, se alcanzaron casi los 100.000 caminantes, con 94.646 credenciales emitidas.
Los años 2020 y 2021 merecen una mención aparte. La cuarentena y las restricciones de movilidad hicieron que el número de peregrinos se desplomara a poco más de 12.000 en 2020. En 2021, aunque todavía con mascarillas y medidas de seguridad, la cifra subió a 42.190 Compostelas. No obstante, el hecho de que el Vaticano autorizara mantener la Puerta Santa abierta en 2022 permitió que el Camino Portugués recuperara fuerza, con casi 125.000 peregrinos.
En 2023, el Camino Portugués entregó más de 141.000 credenciales, un crecimiento del 15% en comparación con el año anterior. El pasado sábado, la Oficina del Peregrino ya había registrado 85.333 Compostelas, un 23% más que en la misma fecha del año anterior, lo que confirma la excelente salud de esta ruta.
Mirando atrás, el Camino Portugués ha experimentado un crecimiento de casi el 400% en la última década. Esto refleja el éxito de una opción que, tanto desde el punto de vista turístico como religioso y espiritual, se ha consolidado. Aunque esta ruta surgió como una alternativa menor al popular Camino Francés, sus cifras se acercan cada vez más a las de la famosa ruta desde Roncesvalles.
Camino por la Costa
Este balance incluye tanto el Camino Portugués original, que comienza en Tui, como la variante del Camino Portugués por la Costa. Esta ruta entra en Galicia por A Guarda y pasa por Oia, Baiona, Vigo y Redondela, antes de llegar a Pontevedra y seguir el mismo trazado hasta Santiago.
El Camino por la Costa comenzó de manera discreta. Hasta 2017, no superó los 7.000 peregrinos, pero ese año experimentó un aumento del 182% en comparación con el anterior. Al año siguiente, creció un 89% más. Aunque la crisis sanitaria también afectó a esta variante, en 2021 superó nuevamente los 7.000 caminantes y recuperó su senda de crecimiento. En 2022, registró un aumento del 285%, con más de 30.000 personas. El año pasado, 2023, batió un nuevo récord al superar los 50.000 peregrinos, un aumento del 72%.
Tino Lores señala: “Para nosotros es lo mismo, ambas rutas pasan por Pontevedra“. A pocos días del 25 de julio, Lores reivindica el verdadero sentido del Camino: “El espíritu del Camino es de largo recorrido. No es solo un espacio físico, sino también espiritual. La diferencia entre un peregrino y un turista es que el turista viene una vez, pero el peregrino repite“.
El hospitalero confía en que este año las cifras sean similares a las de 2023. Aunque pueda haber una ligera desaceleración en los próximos años, la Asociación de Amigos del Camino aspira a igualar o superar las cifras del Camino Francés en 2027.
Según Lores, una de las ventajas del Camino Portugués frente al Camino Francés es la facilidad de comunicación. “Oporto es una puerta abierta al mundo gracias a su aeropuerto, lo mismo que Vigo. Esto facilita la llegada de muchos peregrinos internacionales“.
El futuro del Camino Portugués también pasa por la creciente devoción de los portugueses hacia esta ruta y por el aumento de mujeres peregrinas. En 2023, de hecho, se registraron más mujeres que hombres viajando hacia Compostela desde el sur. “Es un camino femenino, por la Peregrina, por la Santiña… y porque cada vez más mujeres lo recorren, muchas de ellas solas“, subraya Lores.
Basado en Diario de Pontevedra /