La treintena de camas habilitadas en Ebro Etxea se llenan a diario. Hasta la fecha han pasado 569 peregrinos
Este mes de julio está resultando especialmente intenso en el albergue para peregrinos habilitado por el ayuntamiento de Zarauz en el edificio Ebro Etxea, donde los peregrinos disponen de 32 camas para pasar la noche y darse una ducha antes de seguir el Camino de la Costa hasta Santiago.
Desde que se abrió el albergue el pasado 22 de junio, son 569 las personas que han pernoctado en este albergue, atendido por socios y voluntarios de la Asociación de Amigos del Camino de Santiago. Uno de los voluntarios, el zarauztarra Mikel Urdangarin, atendía en la tarde de ayer y recogía los nombres y procedencia de la treintena de peregrinos que habían llegado para las seis. «Esta tarde (por ayer), tenemos en el albergue a peregrinos de muy diversa procedencia. Uno viene de Nueva Zelanda, tenemos holandeses, de Italia, Alemania, Letonia; de Granada, Sevilla, Galicia, catalanes… Todos vienen desde San Sebastián, excepto cuatro que han realizado el trayecto en bicicleta de montaña, desde Irún».
El contacto directo con los peregrinos es realmente enriquecedor para los voluntarios. «A nosotros, a los voluntarios nos ofrece la oportunidad de conocer a mucha gente. Por ejemplo, en el turno del pasado verano conocí a una misionera finlandesa y a un militar retirado austriaco que me estuvo contando sus batallas en la guerra de Irak».
Es el tercer año consecutivo de la apertura de este albergue de Zarauz, que no cerrará hasta el 10 de septiembre. Pasar la noche es gratis. «Sólo pedimos la voluntad, haciendo saber que el dinero recaudado es para gastos de mantenimiento y limpieza», nos indicaba Mikel Urdangarin.
Ante la posible avalancha para estas próximas semanas, a partir del próximo lunes habilitarán 10-12 camas más. Quienes llegaron ayer no tuvieron suerte con el tiempo, ya que a partir de las cinco llovió con insistencia, aprovechando para lavar ropa, hacer algo de compra o simplemente descansar. El albergue abre a diario a las cuatro de la tarde, pero a las diez se impone el toque de queda y se cierran las puertas. Los peregrinos están obligados a abandonar Ebro Etxea para las ocho de la mañana siguiente.
Fuente: http://www.diariovasco.com/v/20100722/costa-urola/albergue-peregrinos-repleto-20100722.html