El albergue de Deba, que ha vuelto ya a cifras prepandemia, ha atendido desde su puesta en marcha en 2014 a 96.895 peregrinos de todo el mundo
El albergue de peregrinos del Camino de Santiago de Deba vuelve a funcionar a pleno rendimiento tras el parón de dos años obligado por la irrupción de la pandemia y maneja ya cifras similares o incluso mejores que las de 2019, ya que el pasado año fueron cerca de 8.000 los peregrinos que pasaron por allí en su andadura por el Camino de la Costa o del Norte hacia la capital gallega. Un número muy destacado teniendo en cuenta que la instalación volvió a abrir sus puertas el 25 de abril tras haber permanecido cerrado desde marzo de 2020.
«Desde esta fecha el albergue se ha mantenido abierto con sus 56 plazas de aforo –explican desde la Asociación de Amigos de los Caminos a Santiago de Deba–, y hemos acogido hasta final del año a un total de 8.000 peregrinos de más de 68 nacionalidades diferentes, destacando españoles 30%, franceses 19% y alemanes 15%. Hombres el 58% y mujeres el 42%. En hombres destaca la franja 60-70 años y en mujeres 20-30».
La plena recuperación de la actividad tras más de dos años en los que el transito por el Camino fue prácticamente nulo hace prever a los responsables del albergue debarra que el próximo mes alcanzarán una cifra redonda: 100.000 peregrinos atendidos, desde que iniciaran su actividad en 2004. «De momento son ya 96.895 los peregrinos acogidos en nuestros albergues –subrayan–, el primero en los bajos del edificio de la Alameda, con solo 6 plazas, después en locales del Colegio Luzaro y desde 2014 en el nuevo albergue instalado en las dos plantas superiores del edificio de la estación de Euskotren».
Hay que destacar que el albergue de Deba es el único del Camino a Santiago en el País Vasco que se mantiene abierto los 12 meses del año. Una oferta completa que solo se vio truncada con la llegada de la pandemia del Covid-19. «En el año 2020, ante la situación planteada por el avance de la pandemia, teniendo en cuenta la diversidad de procedencia de los peregrinos, su movilidad y con criterio de prudencia, por nuestra propia iniciativa cerramos el albergue el día 10 de marzo», cuentan sus responsables.
«Durante varios meses, a petición del Ayuntamiento, el albergue fue utilizado para alojamiento de personas sin hogar», subrayan. «Lo abrimos nuevamente para acoger a los peregrinos el pasado 25 de abril, tras dos años de cierre, tal como lo hicieron el resto de los albergues de los diferentes Caminos, y tras la reapertura se apreció un ligero descenso del número peregrinos en comparación con los del año 2019. Sin embargo en pocas semanas fue recuperándose, y durante los meses de julio, agosto y primera mitad de septiembre el albergue estuvo completo. El número de peregrinos a final de año ha sido similar al de 2019».
Actualmente el albergue está atendido por 20 hospitaleros voluntarios de Deba y poblaciones cercanas que se rotan diariamente. De forma altruista dedican parte de su tiempo libre a esta labor, que consideran gratificante por el contacto y conocimiento que supone la relación con personas diferentes. En verano son reforzados por hospitaleros también voluntarios españoles y extranjeros.
La asociación de Deba invita a cualquier persona que desee participar en esta actividad voluntaria, sin ningún compromiso fijo y de acuerdo con sus posibilidades, a ponerse en contacto con cualquiera de sus socios, en el mismo albergue o en la Oficia de Turismo.
Leído en Diario Vasco