El nuevo albergue de peregrinos de Pontedeume, que se ubicará en el antiguo edificio del hospitalillo, comenzará a tomar forma la próxima semana con el inicio de las obras de rehabilitación. Así lo anunció el Ayuntamiento de Pontedeume a través del responsable del departamento de Urbanismo, Daniel Ríos. Esta intervención, señala el consistorio, supondrá una inversión cercana a los 400.000 euros, exactamente 375.360 euros, financiados con los fondos europeos Next Generation, incluidos en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno central. La ayuda fue gestionada por la Diputación a través de la Secretaría de Estado de Turismo.
El alcalde de Pontedeume, Bernardo Fernández, destacó la relevancia de este proyecto, calificándolo como “muy importante”, ya que no solo mejorará los servicios para los peregrinos en el municipio, donde el Camino de Santiago está teniendo un impacto económico cada vez más significativo, sino que también permitirá la recuperación de un edificio histórico. Este inmueble fue mandado construir por el arzobispo Raxoi en el siglo XVIII.
Fernández agradeció la colaboración de la Diputación y el apoyo del Gobierno estatal, subrayando que gracias a ellos Pontedeume podrá contar con un albergue de peregrinos completamente rehabilitado en un lugar de gran valor histórico.
El consistorio también expresó su agradecimiento a la Archidiócesis de Santiago, que cedió el inmueble para llevar a cabo el proyecto, y a José Ramón Caspón Raposo, antiguo párroco de la villa, que jugó un papel clave al interceder entre ambas partes para hacer realidad esta iniciativa.
La rehabilitación de este edificio histórico, situado en la calle Anfona, implicará una restauración integral que respetará los materiales nobles originales del inmueble, como la piedra y la madera. Se mantendrán los muros perimetrales existentes, y se reconstruirá una cubierta tradicional similar a la que tenía el edificio en su origen. Esto permitirá adaptar la construcción a su nuevo uso como albergue de peregrinos.
El proyecto contempla la creación de una única planta, aunque se ha dejado la opción abierta para una futura ampliación que podría incluir una planta intermedia. El albergue dispondrá de 32 plazas para los peregrinos, además de diversas áreas comunes como espacios de recepción, zonas de descanso y dormitorios, aseos, comedor, lavandería y un cuarto de telecomunicaciones.
Esta rehabilitación no solo proporcionará un nuevo servicio esencial para los peregrinos que recorren el Camino de Santiago Inglés, sino que también devolverá a la comunidad local un valioso patrimonio histórico. Con la llegada cada vez mayor de peregrinos a Pontedeume, este nuevo albergue se convertirá en un recurso clave, tanto desde el punto de vista cultural como económico, para la villa. Este proyecto refleja el compromiso del municipio con la preservación de su historia y la adaptación de sus infraestructuras a las necesidades del presente, en el contexto de un Camino de Santiago que sigue creciendo en popularidad y relevancia.
Basado en Diario de Ferrol / Verónica Vázquez