La actuación entrará en las próximas semanas en su última fase
El parón que desde hace semanas es visible en las obras del nuevo albergue de peregrinos de Orense, que se situará en las inmediaciones de As Burgas, ha provocado que salten las alarmas sobre un posible retraso en la ejecución de los trabajos. Así lo trasladó, por ejemplo, el grupo municipal de Ourense en Común en la última junta de área. Sin embargo, desde Turismo de Galicia —se trata de una actuación financiada por la Junta— se disipan dudas y se apunta a que los trabajos estarán finalmente rematados a lo largo de este mismo verano.
Fuentes de la administración autonómica, señalan que está previsto que en las próximas semanas el proyecto entre en su última fase, que incluye la colocación de los pavimentos o el pintado de las estancias. Además, las mismas fuentes apuntan a que ya existe una partida económica destinada para el mobiliario y que el reto es que esté listo para entrar en servicio a lo largo de los meses de verano.
La actuación no ha estado exenta de contratiempos. A finales del mes de noviembre, cuando todavía no se había completado el trabajo en la fachada que ahora ya luce con el verde característico de la zona en las ventanas, desde Turismo de Galicia se reconocía un parón «circunstancial» en los trabajos del inmueble que se achacaban a «contratiempos administrativos.
En esa misma línea no se oculta que al tratarse de un edificio antiguo en plena zona monumental a lo largo de la rehabilitación integral «Fue necesario tener en cuenta las circunstancias que se dieron, desde el saneamiento y accesibilidad hasta la cimentación o impermeabilización en el edificio teniendo siempre en contra de las construcciones anexas.».
En todo caso, desde Turismo de Galicia se apunta a que los peregrinos están atendidos en la otra instalación abierta en San Francisco y se confía en que una vez finalizada la reforma del inmueble del casco viejo este se convierta «en uno de los albergues más emblemáticos del Camino de Santiago por la Vía de la Plata».
Más de 500 metros cuadrados
Más allá del retraso acumulado en la ejecución de los trabajos, que se iniciaron en agosto del 2016, nadie puede cuestionar el estratégico emplazamiento del futuro albergue de peregrinos de Orense, que dejará San Francisco para situarse a escasos metros de As Burgas, auténtico referente turístico de la ciudad. Cuenta con una superficie superior a los 500 metros cuadrados útiles y para su rehabilitación se necesitarán 600.000 euros.
Leído en La Voz de Galicia